Un joven de 27 años se negó a dejar que la deuda de los préstamos estudiantiles aplastara sus sueños | Cdtineo

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La deuda de los préstamos estudiantiles puede ser una carga que impida a los graduados universitarios perseguir sus sueños, como casarse, comprar una casa, ahorrar para la jubilación o conseguir un título de posgrado.

A los 27 años, Emily Pritchard ya está marcando cada una de esas casillas — y está en camino de acabar con los casi 100.000 dólares de deuda de préstamos estudiantiles que contrajo para obtener su licenciatura en una pequeña universidad privada de Connecticut.

Pritchard, profesional de los servicios financieros y licenciada en contabilidad, ha acelerado su plazo para pagar sus préstamos estudiantiles refinanciándolos a un tipo de interés más bajo — dos veces.

Pero esta residente de Fairfield, Connecticut, está en un camino aún más rápido para salir de la deuda hoy en día, al haber sido elegida como la primera Cdtineo.com Ganador del sorteo de 25.000 dólares.

“Siempre tuve el objetivo de pagar mis préstamos estudiantiles antes de los 30 años,” dice Pritchard. “Antes, eso probablemente no iba a suceder. Ahora ese sueño es posible.”

No hace falta ser licenciado en contabilidad para aprender de la historia de Pritchard. Aunque hoy tiene la sartén por el mango en cuanto a su deuda educativa, no siempre fue así.

Una carga de deuda inesperada

No fue hasta que Pritchard estaba a mitad de camino en la Universidad de Quinnipiac cuando se dio cuenta de la magnitud de la deuda que estaba asumiendo.

Al ser una escuela privada pequeña, los costes anuales de Quinnipiac son superiores a la media — unos 35.653 dólares al año para los estudiantes que reciben ayuda financiera federal, según el sitio web College Scorecard del Departamento de Educación. Pero sus graduados también tienden a ganar más con sus títulos — $60,600 al año, en promedio.

“A mitad de camino, estuve a punto de trasladarme a otra universidad por el coste,” recuerda Pritchard. Aunque aguantó, cuando llegó el momento de empezar a pagar sus préstamos, decidió que necesitaba informarse sobre sus opciones para pagarlos.

Cuando me gradué en 2012, el tipo de interés de uno de mis préstamos era del 11%, lo que es una barbaridad», dice.

Como trabajo en el sector de los servicios financieros, siempre se habla de los tipos de interés», recuerda. “Empecé a buscar en Google, ‘¿Quién refinancia los préstamos estudiantiles?? Cómo es el proceso?’ ”

La refinanciación tuvo sentido — dos veces

Cuando Pritchard refinanció su deuda de préstamos estudiantiles por primera vez en 2013, “había muy pocas opciones.”

Refinanció la mayor parte de su deuda con una cooperativa de crédito, que le proporcionó un nuevo préstamo con un interés del 6.Tipo de interés variable del 5%. Aunque en aquel momento era un buen negocio, cuando la Reserva Federal empezó a subir los tipos de interés, Pritchard quiso tener la seguridad de un préstamo a tipo fijo.

El aumento de la competencia entre los prestamistas, y la mejora de la situación financiera de Pritchard, le permitieron refinanciar por segunda vez un préstamo a tipo fijo con un interés del 4.El tipo de interés del 75% (los prestatarios de préstamos estudiantiles tienen derecho a prepagar o refinanciar sus préstamos sin que se les apliquen penalizaciones).

Pritchard calcula que el tipo de interés más bajo y el plazo de amortización más corto de su nuevo préstamo, que encontró a través del mercado de Cdtineo, le permitirá ahorrar 11.000 dólares adicionales durante la vida del préstamo.

Llevando un estilo de vida mínimo y elaborando un presupuesto cuidadoso — “Todo lo que sobra se destina a los préstamos,” dice — Pritchard ha podido reducir su deuda de préstamos estudiantiles a 65.000 dólares.

Realizar los objetivos de la vida

Por el camino se ha casado, ha comprado una casa con su marido, Brian, y ha vuelto a cursar estudios de posgrado— Pritchard está cursando un máster en finanzas en la Universidad de Fairfield mientras mantiene un trabajo a tiempo completo como profesional de servicios contables en una gran empresa de gestión de activos.

Su empresa se hace cargo de una parte de la matrícula de la escuela de posgrado, y Pritchard paga el resto de su bolsillo. También ha tenido cuidado de practicar lo que predica a sus clientes, y ha estado reservando dinero para la jubilación.

Mucha gente de mi edad se olvida de que hay que empezar a ahorrar ahora, porque ahorrar cuando se es joven tiene mucho más impacto que si se espera hasta más adelante», dice Pritchard.

Hablando de refinanciación

Pritchard cumplía los requisitos para el Cdtineo.El programa de préstamos de Cdtineo es una herramienta que permite a los prestatarios ver los tipos de interés reales para los que están precalificados con varios prestamistas en unos 2 minutos.

Cuando se le preguntó si la deuda de los préstamos estudiantiles es un tema difícil de tratar con los amigos, Pritchard dijo: “Es algo de lo que la gente está dispuesta a hablar. No hablo necesariamente de las cantidades que deben, pero la gente está definitivamente dispuesta a discutir, ‘Qué hizo usted que le ayudó?’ ”

La primera vez que refinanció, la parte más confusa de la experiencia fue darse cuenta de que tenía muchos tipos de préstamos, muchos de ellos con diferentes tipos de interés y beneficios. Al igual que muchos prestatarios que han refinanciado, Pritchard optó por no refinanciar algunos de sus préstamos federales para estudiantes a bajo interés.

Su mayor reserva sobre la refinanciación era que estaba planeando comprar una casa, y le preocupaba que pudiera afectar a su puntuación de crédito. Pero esa reserva resultó ser infundada.

“A la larga, realmente me ayudó, porque pude pagar (la deuda de los préstamos estudiantiles refinanciados) más rápido,” dice.

Pritchard dijo que ganar el sorteo de 25.000 dólares de Cdtineo no la tentará a abandonar su enfoque disciplinado y estratégico para pagar sus préstamos estudiantiles.

“Esto liberará más dinero para destinar a esos préstamos,” dice.

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